El blog de Pucca está en obras. Vuelvo pronto, ya casi queda

14 febrero 2007

2

Revisé mi corazón


Si claro, el verdadero amor existe cuando el dar provee más satisfacción que recibir. Diríamos que así quieren los padres. También he escuchado que el verdadero amor significa no esperar nada a cambio. Y me pregunto si siguen siendo los padres, cuando ellos esperan respeto. Leí que el verdadero amor es incondicional, como la de Luis Mi, pero nada más.

Los Sabios dicen que cuando se consigue el verdadero amor, se vuelve eterno. Arremete en contra de la fuerte resistencia del "yo" y se siente un poco del resplandor del verdadero amor dentro. Si, creo que sí, así se siente. Pero ¿quien soy yo hablando de amor? Mi historia en ese renglón es confusa.



Recién nacía, fui comprometida en matrimonio. Sí, en México, más exactamente en el DF, fui dada en matrimonio, siendo una bebe. Al estar bajo cuidado de mi nana, ella me llevaba a los lavaderos del edificio donde vivíamos, mientras lavaba. Ahí también, iba una chava con a un bebé, que cuidaba. Soñaban que, cuando grandes, aquellos bebés que sincronizaban balbuceos y llanto, se casaran. El es doctor, lo supimos hace unos años y, seguía soltero, fiel a mi. Carlos, creo.

Luego, más que en mi memoria, en la de mi familia está mi primer noviazgo. Tenía 4 años. Era mi cumpleaños. Mis papás acostumbraban, celebrarnos nuestro cumpleaños en nuestro salón de clases. Mi hermana mayor y yo, cumplimos años en la misma semana, así, era una fiesta en noviembre. En esa celebración había un niño que se acercaba frecuentemente a mi papá, y cuando éste se percató, el enenato se presentó como novio mío. Octavio se llama.

Todavía niña, empecé a soñar con un príncipe azul. Ese príncipe, era el hermano de mi amiga. No llegué a enamorarlo, pero me apropié de parte de su corazón. Durante años, fuimos grandes amigos. Hoy, me da tristeza verlo tan distante. ¿Qué pensará él al verme? No sé si le hice algún daño. El a mi, no me dañó. Su lejanía me duele y aún así lo quiero. Deseo con toda el alma, que sea feliz.

A los 17 tuve mi primer noviazgo, de 23 horas. Una hora de declaración, 2 de duda y una para decir que si. 18 horas sin verlo ni hablar con él y una para decir que no, claro que no quería ser su novia. Es casi un secreto familiar el nombre de dicho ser. Y mis amigos de Salvatierra, solo lo recuerdan para echarme carrilla. ¡ya pues! Un desliz lo tiene cualquiera.

Luego conocí a un ser extraño. Duro e irónico, me atrajo y lo conocí. En realidad era un ser lleno de amor. Me asustaban sus regalos, siempre firmados con calaveras. Pero, era su manera de expresarse. Siempre me tenía presente y yo lo quería y admiraba mucho. Casimiro, le decíamos se cariño, porque necesitaba mucha ayuda para poder ver bien. El contexto era el apostolado. El noviazgo duró pocos meses, por diferencia de inquietudes. Me asusté, lo confieso. Y eso no fue bien visto. Hoy tiene dos hijas y vive lejos de México, y ahora que lo pienso, cerca de acá.

A uno días, conocí a un norteño. Más alto que todos, guapísimo y muy comentado en mi salón. Yo era porrista y el venía a un inter teresiano. Fui feliz 3 días, enamorada de esa manera por primera vez en mi vida. Cartas fueron y vinieron por más de un año. Largas llamadas telefónicas. Hasta que cada quien hizo una vida de verdad. Por medio de Marce me he mantenido al tanto. Para mí, “Manuel”, siempre será un gran ser.

Ya estaba en la universidad. Falleció una persona muy cercana a alguien que yo empezaba a conocer. Me dolió imaginar su dolor. Durante muchos días traté de no dejarlo solo. El estaba susceptible y yo, siempre lo soy. Me confundí y dije quererlo, en realidad lo que siempre quise es que el fuera feliz, y creo que ayudé a que lo fuera. Eso significaba que yo me volvía menos necesaria y eso me dolió. Alguien me sacó de ahí y me llevó a salvo a mi casa. Me gusta saber de él. Y, como siempre, deseo que sea feliz. Para mí siempre será mi amigo.

A ese salvador lo vi 3 días más y le pedí que fuéramos novios. Unos días después, le escribí al norteño que terminábamos porque ya tenía otro novio. Ah!! Claro!!! Yo seguía con el norteño. Este nuevo noviazgo fue con alguien 5 años más grande que yo, pero con cara y corazón de un niño. Fue la primera vez que dije un “te amo”. Era, para mi, todo. Era mi razón de vivir, imaginaba el resto de mi vida con él. Era mi familia. Mi familia lo acogió y su familia a mí. Vivimos grandes fiestas y crecimiento mutuo. 6 años y medio después, abruptamente, todo terminó. Ambos creemos que fue para bien. Hoy, si había algo que perdonar, ya lo hemos hecho. Ahora contamos el uno con el otro.

Mi corazón estaba roto, estaba dolida y apareció el ser que la psicología siempre advierte que aparecerá. El ser, que se asemeja al padre. Mi nana, incluso, se asustó del parecido de éste ser con mi papá, cuando éste era joven. Su actitud fresca y soberbia y su chispeante ingenio provocó “enamoramiento” en mi. Y así como llegó, se fue. También, se le iba de las manos, el encanto que generaba en las mujeres. Gracias pues, porque por él cambié drásticamente mis planes, supe lo que es vivir en las tinieblas y supe que se puede salir de ellas. Creo que “el gusano” es feliz. Que así sea.

Dicen que los ángeles nunca fueron hombres, ni que éstos se vuelvan ángeles. Y será el sereno, pero él lo fue y lo es. Ha sido un amor paciente y entregado. Creo que el es feliz solo porque existo. Esa siempre ha sido mi definición del amor. No me cree perfecta, de hecho le incomodan muchas cosas de mí. Vivir con el, es una vida casera, de paz. Yo quiero que él sea feliz y el quiere lo mismo para mí. Día a día intentamos descubrir la fórmula para lograrlo.

Ándele que son 9!!! Hay estudios que dicen que conoceremos 9 personas significativas en la vida. 9 personas con las que viviremos el amor. Y entre esas 9, está el amor de la vida. No necesariamente es el 9, sino cualquiera de ellos. Cualquier relación posterior, será la repetición de algún tipo de relación que ya tuvimos. Aunque… el bebé de los lavaderos no creo que cuente, ni el enanito del Kinder, mucho menos el noviazgo de horas. O sea que me quedo en 6!!!

¿Que si me he enamorado más veces? Debo contestar que sí, sino me caerán decenas de reclamos, recordándome gente. Pero tengo mis razones para no relatar sobre ellos. Uno que otro se ha vuelto famoso. Otro es delincuente. Los más, nunca me pelaron. Y finalmente, hay, quien, debo confesarlo, nunca merecí sus besos. Merecía algo mejor.

¿Hablar de amor? Ahí está, no tengo nada más que decir. He vivido el engaño químico del enamoramiento. Me he sentido protegida. He amado. He probado el sabor amargo del desamor. Me he alejado de alguien que amaba. Me he sentido amada. He roto corazones. Lo normal, que todos hemos de vivir.

¿Festejar el amor? Órale, lo festejo en mi historia, y que todos los seres que he recordado hoy, estén viviendo esa intensidad en el corazón, de amar y saberse amados. Y que, quien lea esto, recuerde su propia historia y desee, de corazón, lo mismo.

La neta, que incómodo es hablar del amor. Creo que lo mío, lo mío, el 14 de febrero, es celebrar la amistad.

2 comentarios:

  1. amiga, tu delirio de las 4 y fraccion fue maravilloso como todos, me declaro como tu fan numero uno y por favor no dejes de hacerlo creo que es como terapeada comunitaria.
    Te quiero y pues si celebremos la amistad, pero ahi gusrda un poco de celebracion para el amor que buena falta hace.

    ResponderBorrar
  2. gracias por tus fracciones de vida, dadas en estas letras y renglones, que rico recordar los antiguos amores, y saber que no tienen que ser 9 los recuerdos, a mi me llego mi no.5, con eso de que no hay quinto malo...como (y con) anillo al dedo!
    Saludos

    ResponderBorrar